PLANETA BOCA

Junio de 2007. Luego de vencer al Gremio de Porto Alegre en las finales de una nueva edición de la Copa Toyota Libertadores, Boca se consagró campeón de América. Sí, otra vez Boca.
Junio de 1998. Asunción de Carlos Bianchi como entrenador de Boca con la idea de acabar con una densa etapa de transición y hacerle frente a una era de tanta supremacía de su clásico rival, River. Desafío difícil aunque interesante para quien fue alguna vez campeón del mundo con Vélez Sarsfield. Pero ni el más fanático simpatizante boquense hubiera imaginado que el desembarco del Virrey iba a ser el puntapié inicial para un dulce camino a la cumbre del mundo.
Con Bianchi, Boca comenzó ganando títulos locales para después expandir las fronteras. Todo empezó con los logros en el Apertura ´98 y Clausura ’99, que le dieron la confianza para encarar los objetivos internacionales. Así llegaron las Copas Libertadores ´00, ´01 y ´03, consiguiendo a su paso otros dos torneos domésticos (Apertura ´00 y ´03). En el medio tocó el cielo con las manos dos veces. Alzó las Copas Intercontinentales ´00 y ´03, derrotando a potencias mundiales como Real Madrid y Milan, para hacerse dueño de todo. En un puñado de años, Boca se mostraba al mundo en su máximo esplendor. Con el Chino Benítez como entrenador, obtuvo la Copa Sudamericana ´04, logro que repetiría de la mano de Basile en ´05. Pero el Coco no se quiso quedar atrás con la historia reciente de Boca y se llevó también el Apertura ´05, el Clausura ´06 y las Recopas ´05 y ´06, transformándose en el más efectivo de todos al quedarse con cada uno de los torneos que disputó. Hoy, quien tiene la envidiable responsabilidad de calzarse el buzo de director técnico es Miguel Ángel Russo, que entendió lo que pretende este club y acaba de quedarse con la Copa Libertadores, la cuarta en ocho años para la vitrina de la Bombonera. Con 17 títulos, Boca es el más ganador a nivel internacional. Números que impactan y sorprenden. No por nada esta etapa consagró a varios ídolos como Guillermo Barros Schelloto, Juan Román Riquelme y Martín Palermo.
Pero en el folklore del fútbol esto no sólo incumbe al conjunto azul y oro. Por la eterna rivalidad, el éxito del club de la Ribera es inversamente proporcional al de River. Por eso la actualidad xeneize se ve mucho más fortalecida, ante la grave crisis futbolística e institucional que viven sus “primos”. La entidad de Nuñez es la contracara de su archirival. Desde rotundos fracasos en el plano internacional y una sequía de 3 años sin campeonatos locales hasta un sinfín de problemas internos ocasionados por una administración ineficiente e inoperante llevaron a esta institución a perder buena parte del prestigio alcanzado a lo largo de su rica historia.
Y Boca sigue ganando. ¿Cuál es el secreto de tanto éxito? Haciendo referencia al hit de la tribuna, pasan los años, pasan los jugadores, pero lo que no pasa es......la dirigencia. El secreto de este Boca es tener dirigentes con ideas bien claras, que toman decisiones acertadas en todos los aspectos relacionados a este deporte. De la mano de un presidente muy capaz, se construyó un proyecto ambicioso para llegar a los primeros planos del fútbol mundial. Siempre hubo buena comunicación y mensajes claros desde las más altas jerarquías hasta las más bajas y desde adentro hacia afuera. Y Boca cumplió con todo lo que se había planteado. Y Boca ganó todo lo que se había propuesto. Y mucho más.
El club nacido allá por 1905 disfruta su momento de gloria y lleva casi una década de hegemonía futbolística a nivel local e internacional. ¿Seguirá este Planeta Boca o alguien tratará de imitar su modelo para poder llegar a la cima?


La consagración frente al Gremio en la Copa 2007



Nota redactada por Fernando A. Ferrari