EL TABLON: DESAPARECIDOS

El 24 de mayo del 2004, no será un día más en la vida de Gastón Gaudio y de Guillermo Coria. Fue el día en el que la Philipe Chatrier los enfrentó en la final del Roland Garros. Coria parecía que se llevaba fácil el match. El Mago, era considerado el mejor jugador de tierra batida de ese

año, venía de obtener el Master Series de Montecarlo hace aproximadamente un mes y encima tenía al Gato contra las cuerdas, ya que se había impuesto en los primeros parciales por 6-0 y 6-3. Pero la historia haría un cambio notable, ya que el muchacho de Venado Tuerto sintió una molestia y le cedió los tres sets restantes al de Temperley con los que alzó el título del Bois de Boulogne.
Aquel día, sería el más importante de la carrera tenística de Gaudio y el más triste de la de Coria. Pero más allá de eso nadie imaginaba que iban a estar atravesando este momento tres años más tarde en los que se ubican, El Gato 99º del mundo y El Mago 349º, y muy lejos de un court de tenis.

Gaudio a partir de su título parisino, tuvo un brillante desempeño en el año 2005 en el que llegó a ser número 5 del mundo (en abril), y sumó a su vitrina los títulos de Viña del Mar (Chile), Buenos Aires, Estoril (Portugal), Gstaad (Suiza) y cerró con el de Kitzbühel (Austria). Pero el 2006, decayó muchisimo su nivel, se mostró enfurecido con un sinfín de raquetas rotas. La historia no iba a cambiar este año, ya que se enfrentó con la gente en el torneo de Buenos Aires: “¿Loco a ustedes les sale todo bien?, yo no soy perfecto, estoy jugando mal”, expresó en una conferencia de prensa, en respuesta a los abucheos de la gente.

Para Coria, ex número 3 del mundo (mayo ´04), desde aquella final que perdió en la Philipe Chatrier, cambió todo en su carrera. El único título que cosechó desde aquel fatídico partido fue el de Umag (en el 2005). Después tendría una gran cantidad de problemas con su hombro, operaciones de por medio, una crisis con sus entrenadores que eran cambiados constantemente, problemas personales y una caída en su nivel de juego, que incluyen una gran cantidad de dobles faltas cometidas. En la actualidad esta muy lejos de un court tenístico.
Estos dos grandes tenístas, enfrenados entre sí, que lograron deleitarnos en algún momento, que superaron los 5 millones de dólares en premio, que tienen fama y prestigió, parecen estar muy lejos de ese nivel mostrado en aquel Roland Garros del 2004.

FEDERICO SAINT ROMAIN

Peleas entre Gaudio y Coria